PopNovel

Leer en PopNovel

Ojos Celestes

Ojos Celestes

Autor:Lazzo22

En proceso

Introducción
Se pueden derrumbar las paredes del corazón con tan solo ver una jodida foto? Explícame... si alguien me hubiera dicho UE de esta menera conoceria eso que tanto evadí en toda mi vida le hubiera volado la puta cabeza por bromista, si. Odio las bromas y odio los sentimentalismos, solo te hacen débil y tonto, necesitas ser fuerte para poder vivir una vida como la que me animé a tener, ninguna mujer va a dañar lo que tanto he luchado. Al parecer nada de lo que yo creía era y ella se encargó de hacérmelo saber...
Abrir▼
Capítulo

Alicia Holmes

__ Solo debes firmar estos papeles, de lo demás nos encargaremos nosotros. __ Me dice mi madrastra quien está con una cara de victoria al lado del abogado, sabe que ahora estoy en sus manos y entre la espada y la pared, no sea cual sea peor. Morir asfixiada por sus manos o dejar que la espada atraviese mi corazón.

__ Debe haber otra solución, esta no puede ser la única. __ Decía esperanzada. Ella sonrió y negó varias veces antes de hablar.

__ No la hay, ya he mirado todas las posibilidades y este inversionista es el mejor candidato. Necesitamos su apoyo para mantener la empresa además él ya sabe todo y acepto la boda, ya has leído los términos, te conviene y no te perjudica en nada, nena unos años y estaremos fuera de esto.__ Me dice calmada y tratando de que entienda la situación, obviamente no lo hago, hasta donde sabía mi padre estaba bien económicamente y la empresa estable, de la noche a la mañana esto no puede ser. Además, que tipo loco acepta casarse sin conocer a su prometida, me niego a casarme con un vejestorio, con un desconocido, con alguien a quien no ame.

__ No lo sé Graciela, quiero saber más detalles, revisaré otra vez todo. __ Ella asintió confiada y me entrego los papeles, en efecto todo parecía estar en orden, sobre todo el contrato matrimonial que era breve, cinco condiciones enumeradas, sin letras pequeñas y firmado aún lado por el susodicho. 《Mauricio Vitale》

Leí su nombre varias veces tratando de memorizarlo, luego procedí a poner mi firma al lado de la de él. Firme mi condena y la sonrisa de mi madrastra se ensanchó. Un escalofrío recorrió mi cuerpo. ¿Quién era Mauricio Vitale? Me pregunté.

__ Verás que es lo mejor, era aceptar tu matrimonio o aceptar la ruina, y obviamente no queremos quedar en la calle. __ Volvió a sonreír y recogió los papeles para entregárselo al abogado. __ Hágale llegar esto al Sr. Vitale. Y por favor que no tarde en cumplir con su parte. __ Le dice al aludido, él recibe y luego abandona la sala. __ Y tu pequeña, ahora eres la señora Vitale, creo que no tengo mucho que explicarte, ese contrato será aprobado por el notario y listo, tu ahora esposo cumplirá con el acuerdo y se encargará de ti. __ Quede en Shock, obvio ya sabía lo que pasaría luego de firmar, por lo que no tenía que repetírmelo, no era necesario que me recordará mi desgracia. Salí enojada del lugar y corrí a mi habitación a buscar mi computadora, algo debía haber en la web referente a mi ahora esposo. Juro que lo haré pagar por esta humillación, no que muy rico y todo y ni para pagarme una maldita boda o un hermoso vestido, imbécil.

No era una niña tonta, sabía que entre familias se manejaban este tipo de tratos, lo que nunca pensé es que me tocara a mí, aparte lo normal es que la boda se lleve a cabo, falsa y fingida pero al fin todo el protocolo. O por lo menos la novia conoce al novio, pero no, yo fui la de malas, ahora quien sabe en qué lío me metí y con quien. Escribo el nombre en el buscador y aparece... ¿Nada?

Maldito infeliz, ahora tenía más curiosidad, ahora estaba ansiosa, ahora quería saber todo. Suspire derrotada y mi teléfono sonó, mi mejor amiga Treicy avisando que estaba afuera. Tome mis cosas y salí afanada.

__ ¿A dónde crees que vas? __ Pregunta Graciela quién está tomando un té en la sala. Ella nunca me ha tratado mal, agradezco que este pendiente de mí y que en todos los años anteriores se haya portado a la altura, es ahora donde no sé si pueda soportar, mantiene una sonrisa cínica que me hace dudar infinitamente de ella.

__ Voy a seguir con mi vida, ¿estoy en mi último año de universidad, recuerdas?__ Le digo y me marcho.

__ Ten cuidado, recuerda que ahora eres una mujer casada. __ La escucho decir a mis espaldas y maldigo.

__ Vamos tarde, vieras que mi papá se puso malito otra vez. ¿Me estás escuchando? __ Yo con problemas y ella contándome los de ella. La verdad no la estoy escuchando, el nombre de mi ahora desconocido esposo no sale de mi cabeza.

__ Disculpa amiga, perdón. Cuéntame todo. __ Le respondí con fingida sonrisa y ella continuo.

__ Te digo que mi padre volvió a ponerse mal, solo fue un susto dice el médico, pero aun así, es horrible. __ Esta vez si la escucho. Así seguimos hablando de su vida, luego de los trabajos y clases para hoy, no me atreví a contarle nada, seguro pondrá el grito en el cielo y querrá asecinarme, siempre hablamos de rechazar este tipo de cosas, aunque nos tocara trabajar y sobrevivir solas. Apoyándonos juntas. Me tomaré mi tiempo para hablar de esto, quizás no sea tan grave.