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Aullidos de Dolor

Aullidos de Dolor

Autor:Ilerey

En proceso

Introducción
    Hay muchos seres mitológicos, unos dicen que existieron hace siglos, otros que solo son inventos de la antigua humanidad y otros creen que están ocultos entre los seres humanos. Solo son leyendas o eso es lo que creemos o lo que nos han hecho creer, se ocultan para no causar temor al ser humano y para protegerse así mismos, pero ay algunos que se sientes aprisionados al no poder ser ellos mismos ante el mundo y los terminan descubriendo pero la tecnología a estado de su parte ya que se puede tomar como algo falso. Y eso los han tranquilizador pero también les causa preocupación ya que también sus armas son más mortales que antes.         Tienen miedo que con esas armas los maten, ya que los humanos tienden a matar por sobrevivir, si algo amenaza a su especie toman medidas de comprender algo que ya no tiene vida, es algo ilógico pero cierto es una supervivencia muy dura para aquellos que no pertenecen a esa especie y el ocultarse para no morir.     Pero también hay situaciones crueles entre ellos, en sus reglas que son muy estrictos para su propia supervivencia, las nuevas generaciones cada vez se entran estresando po ello y sean rebelado y eso causa un grave castigo, si lo negosia puede aún se le pueda considerar apto para seguir en la manada pero si no es negociable causa el destierro o la muerte no importa si apenas es un niño, solo un descuido o una casualidad. No hay salida para ninguno ni por más inocentes que sean tienen que seguir las reglas al pie de la letra o será su perdición.         El viento soplaba como si de un huracán se tratase, las nubes cada vez más se juntan y se tornaban de un gris muy pronunciado señal de una tormenta y un silencio que muy frecuente se significa paz pero este silencio este ambiente tan tranquilo era muy peligroso. En una parte muy remota del bosque se escuchaban gritos y lloriqueos de desesperación y dolor, eran tan fuertes que se podría decir que se alcanzaban a escuchar asta el pueblo más cercano a la zona. —¡NOOO! Ese fue el último grito que se escuchó, que hizo que varias aves volarán asustadas y de tantas personas solo una alcanzará a escuchar tal gritó tan desgarrador. Aquella persona o mejor dicho aquel niño que escucho aquel grito hizo que temblará, su corazón latía tan rápido que uno podría decir que en algún momento se detendría, su piel se puso tan pálida como si no tuviera vida y un semblante de terror.
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Capítulo

Desde ese momento en que escuche ese sonido no pude ser el mismo niño de antes, ya no pude estar en lugares con mucho ruido, mis padres a todo momento desde ese día estuvieron asta el último de sus momentos apoyando y cuidándome, pero llegó el momento en el ya no fue así se tuvieron que ir de mi vida para siempre.

Ya no seguían conmigo cuando apenas tenía unos 8 o 10 años de edad no recuerdo, ya que el último momento que estuve con ellos mis padres estaban discutiendo y peor aún su discusión empeoró cuando estaba dando la cuerva por una carretera no tan lejana de la ciudad, sus gritos de susto en ese momento nunca los voy a olvidar.

—¡Si tan solo lo dejaras incorporarse con los demás el no fuera así!

—¡Entonces estás diciendo que es mi culpa, que nuestro hijo, este traumatizado!

—Sabes que no dije esto Lucia...

—Si tan solo pasarás más tiempo con Hayden, el al menos tuviera contacto con los niños del vecindario.

Y de un momento a otro había despertado en un cuarto de hospital, cómo ninguno de mis familiares se quiso hacer cargo de mi me tuve que quedar en un orfanato, terminé llendo en familias temporales pero me regresaban al poco tiempo ya que pensaban que era un bicho raro y no comprendían mi estado mental, e incluso yo ya no me entendía.

Las personas del orfanato tenían miedo que desarrollará una esquizofrenia debido a esto y decidieron llevarme al psicólogo, con el pasar del tiempo de fui acostumbrando, pero el terror a los gritos no se pudo tratar más de lo que se había hecho, con ello he podido identificar varios tipos de sonido y en especial los gritos a los cuales solo soy tolerable a tres; alegría, sorpresa y tristeza, ya que son menos intensos que a los demás; miedo, rabia, dolor y placer, una persona común solo se asustaría en los primeros tres de esta segunda sección pero yo terminaría petrificando me, este trastorno termino siendo que me aislará de todos, ya que pensaban que era raro y asta yo lo pienso.

Tan solo una vez en mi vida me gustaría encontrar ha alguien que me entendiera o al menos me tratara de entender…

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Caminando de regreso al orfanato, tienen pasar una carretera algo extensa para llegar a la ciudad y está atraviesa un bosque grade, siempre al pasar por ahí tiene que escuchando otro tipos de sonidos para no entrar en pánico, ya que en ese por ese lugar fue donde escucho aquel grito desgarrador.

Pero ese día fue muy pero muy diferente a otros, ya que a mitad del camino se encontró un par de patrullas y médicos forenses, trato de ver lo que estaban haciendo pero algo familiar llamo su atención.

Un suéter de color turquesa uno parecido al que le había dado a una niña del orfanato por el día de su cumpleaños gusto dos días antes, se acercó y lo que vio fue tan espeluznante. El cuerpo de la niña está descuartizado, partes disfigurados y mordisquiados como si lo hubiera hecho un animal, pero no fue todo aun lado estaba otro cuerpo de un niño más pequeño uno de los nuevos en el orfanato.

Esta escena hizo que débil estómago se revolviera causando sacará todo lo que había comido ese día, las autoridades corrieron a su lado, preguntando cómo se encontraba y este no podía responder, su rostro de miedo y su tez tan pálida que parecía un muerto. Se abrazaba a si mismo como si estuviera protegiéndose de algo o como de un niño pequeño se tratase. Todos se quedaron extrañados al ver aquella situación de pánico, trataron de acercar más pero no podían ya que conocían algo sobre ese tipo de ataques

De pronto se escuchó un aullido de aparecer de un lobo, eso fue el detonante para que el chico empezará a gritar de miedo o de dolor como si algo lo estuviera atacando lo, como si lo estuvieran torturando en ese mismo momento, sus gritos desgarradores haciendo que las personas a su alrededor tuvieran más atentos a aquello. Aún se escuchaban los aullidos y el chico segura retorciéndose de miedo y dolor en el suelo, a unos momentos paso un coche, este freno causando una gran chirrido, alguien bajo apresurado de el.

—¡Hayden, tranquilízate!— dijo aquella mujer que bajo del coche mientras ponía su mano en la espalda del chico.